
Mira lo que ocurre contigo y con tu bebé en el cuarto mes de embarazo
Tu bebé está cada vez más activo: ¡puede que incluso empieces a sentir cómo se mueve! Al principio, estas sensaciones serán muy leves, como mariposas o burbujas en el estómago. Puede que incluso no sientas nada durante un tiempo. Ten paciencia... no tardará mucho. Tu bebé ya puede abrir la boca, poner los ojos en blanco, fruncir el ceño ¡e incluso meterse el dedo en la boca y chuparlo!
Sus sentidos siguen desarrollándose: su retina empieza a funcionar y su sentido del tacto se está desarrollando, gracias a los «corpúsculos táctiles», que son zonas muy sensibles y pequeñas en la piel. Sin embargo, tendrá que esperar hasta la semana 24 para experimentar esta percepción táctil, ya que solo en ese momento su sistema nervioso habrá alcanzado la madurez suficiente.
Su sentido del olfato también se desarrolla poco a poco, pero tu bebé no será capaz de detectar olores hasta que entre en el séptimo mes. También empezará a aprender el gusto gracias a los sabores del líquido amniótico, que varían en función de los alimentos que ingiere la madre. Por último, a partir de la semana 15, ¡tu bebé empezará a oír!
A través del líquido amniótico identificará sonidos como los latidos de tu corazón, tu estómago y, sobre todo, tu voz. Puedes empezar a hablarle suavemente para calmarle, aunque todavía no te entienda.
Hábitos alimenticios en el cuarto mes de embarazo
Las náuseas y la sensación de rechazo a ciertos alimentos del primer trimestre habrán llegado a su fin: recuperarás el placer de comer y disfrutarás de la comida. Puedes darte caprichos, ¡pero no te excedas!
En cuanto al aumento de peso, no hay una regla estricta: todo depende de tu peso corporal, de tu estado de salud y de tu metabolismo. En promedio, el aumento de peso ideal será de 300 a 350 g por semana durante el segundo trimestre; pero tu médico sabrá decirte qué es lo mejor para ti.
Presta especial atención a tu ingesta de yodo, que es un nutriente esencial para el buen funcionamiento de la tiroides. Este mineral puede suministrarse a través de los alimentos, especialmente la sal de mesa yodada.
Pero cuidado: la sal no debe consumirse en exceso. No tiene sentido llenar el plato de sal, ¡es cuestión de encontrar el justo equilibrio! No dudes en pedir consejo a tu médico si quieres saber más.
Ganas de comer algo dulce en el cuarto mes de embarazo
Soñar con una buena tarta de fresas o un delicioso mousse de chocolate durante el embarazo es muy común. Una vez más, son esencialmente tus hormonas las responsables. ¿Debes ceder a estos ataques de hambre y deseo de dulces?
Sí, de vez en cuando pero con sentido común, por supuesto, y manteniendo una alimentación variada y equilibrada. Ten en cuenta que para saciar tus ganas de dulce, lo ideal es optar por la fruta fresca o los frutos secos, los postres lácteos y el yogurt natural. Prefiere los productos "sencillos" en pequeñas cantidades: por ejemplo, come un cuadrado de chocolate negro en lugar de un pastel rico en grasas y azúcares.
Tu bebé está dentro de una burbuja en tu vientre y sus órganos vitales siguen desarrollándose a cada segundo que pasa. ¿Estás impaciente por saber el sexo de tu bebé? Ten paciencia, ¡la 2ª ecografía ya está reservada para el mes que viene!